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No sé si confundo “calma” con depresión… o que la depresión pese a las tempestades que se presentan es lo único que me aporta calma. Cuando me evado y me escondo del mundo pero a la vez me lleno de miedo y me lleno de un vacio infinito que parece contener una galaxia de agujeros negros.

Esos momentos en los que deseo abrazar la vida y sonreír se hacen cada vez más escasos, y es que al final es cierto que ningún suceso de los que me ocurren deja de tener un efecto… pese a querer ignorarlo o engañarme una vez más a mí misma.

Me muero de miedo de querer volver a respirar y sentir de nuevo que me falta el aire… pero no puedo tampoco permitirme caer de nuevo en la desidia que me lleva al llanto, a la desesperación y a una oscuridad aun mucho mayor.

La depresión tiene que dejar de ser mi único modo de escape y de descanso. La depresión debe de dejar de ser una opción tras más de 20 años de idas y venidas. No me resigno a ser lo que mi madre catalogo en su día como una enferma crónica, no quiero seguir agonizando hasta el día de mi muerte.

Nunca imagine que daba esa sensación de felicidad al mundo, yo que reía por fuera y lloraba por dentro. No sabía que se me daba tan bien ocultar lo que pasaba en mi interior porque hace demasiado que adivino la tristeza en mi mirada cada día. Y al final eso ayuda a que el mundo sienta que soy una roca fría, que no siente dolor que solo ríe y vive. Pero en la soledad de mi mundo soy otra persona distinta que no dejo que el mundo vea. Quien ha visto esa parte de mi se ha marchado o lo ha usado para hacerme sentir incluso peor. Claro, que imagino que no es fácil entender como alguien puede parecer tan feliz de cara al mundo y al entrar en casa todo eso se desvanezca hasta ser una especie de espectro que se arrastra de modo silencioso por la casa y que llora en los rincones. No siempre soy así, pero si he pasado tantos días de llanto, tantas mañanas con miedo a salir de mi cama llorando por no poder levantarme y sentirme inútil, impotente… como explicarle esas sensaciones al mundo y que entiendan que te hacen a ti mas daño que al resto. No es fácil, yo que siempre se hablar de casi todo en este caso me quedo sin palabras y dudo que exista una sola palabra que pueda explicar esa inmensidad de vacío que puede llegar a sentir un ser humano incluso cuando está luchando por vivir.

El mundo se ha convertido en un escenario en el que interpreto mi obra hasta que se cierra el telón y entonces me transformo… y caigo incluso más abajo que el resto de los mortales, me hundo en el infierno de mis demonios.

Me he aferrado durante demasiado tiempo a lo que creía que era para mí, a lo que sentí que merecía… pero hoy veo que nadie merecía eso y puede que yo un poco menos. Creo que ya había sufrido demasiado antes como para seguir perpetuando ese dolor que me acompaña desde que recuerdo.

Ya no me puedo permitir seguir viviendo entre esos agónicos lamentos, mirando al suelo, atragantándome con mis lagrimas… mareada y somnolienta… inapetente y sintiéndome completamente fea por dentro y aun mas por fuera. No quiero vivir en crisis, puedo soportar tener mis momentos pero vivir en una crisis constante como la ultima en la que creí volverme completamente loca.

Ahora empiezo a entender que vivir de ese modo y aceptar que no hay una vida mejor es lo que me hace ser una loca y no lo que siento… no estar dolida por un dolor que nunca explique de un modo sano al mundo, que nunca llegue a procesar debido a la inmadurez de mi cerebro y a la sucesión de los hechos que se escapan a mi control. Siempre fui una especie de veleta a la deriva del viento que estuviera soplando en casa… nunca podía tener la idea o el sentido de estabilidad, paz, tranquilidad…. Incluso a día de hoy creo que solo como rendo la paz como depresión y aislamiento y realmente eso no es nada tranquilizador.

Mi mundo se ha hecho en torno a las experiencias que me tocaron vivir y ahora solo me siento una víctima de las circunstancias que se cae cada vez que quiere cambiar ese mundo… pero ya no quiero tumbarme a esperar que cambie solo o que simplemente mi luz se apague del todo.

No sé muy bien como seguir avanzando, pero no he de repetir lo mismo que he estado haciendo hasta ahora si deseo un resultado distinto. Son cosas básicas que por mucho que me repita no siempre soy capaz de llevar a cabo, ciento que mis peores defectos están completamente automatizados y que tengo que seguir luchando en contra de ellos.

Comprendo que luchar contra mi mente, tratar de ver el mundo de otro modo solo con ideas contradictorias en mi cabeza me llevan a un agotamiento mental que se resume en angustia y confusión, en miedo y soledad. La medicación aclara en parte mi mente pero no puede cambiar mi mundo, veo que empiezo a quedarme de nuevo corta en mis pasos y que me estoy estancando de nuevo en la comida de la pena… del dolor y de la perpetuación de esta condición que me acompaña. Pero no quiero seguir siendo un títere de mis emociones, no quiero seguir arrastrándome ni un segundo más.

Quiero sentir que por una vez mis pulmones se llenan del todo de aire y no que hay un tope de ansiedad que me ahoga, que parece que no me permite respirar. Hoy me he dado cuenta de que soy un ser humano y que no tengo porque actuar constantemente como si el dolor no me tocara, porque aunque suene bonito eso es solo una utopía, una mentira que a la larga solo me hace mas daño.