miedo
Hay
días que vuelo, mi mente vuela y es como si hubiera ido a otro planeta. Desde
allí observo el mundo casi en silencio, recuerdo y medito sobre cosas que ya
pasaron. Es como si mi mente necesitara marcharse de este mundo unas horas,
unos días… para poder asimilar vivencias que vienen a mi cabeza y que crecen
como flores en primavera.
Ideas
desordenadas que al final me ordenan. Momentos de locura que te llevan a ideas
lucidas. Imagino que es solo revivir situaciones que te marcan y ahora mi parte
lógica del cerebro trata de procesarlas, de darles un sentido, una razón de ser
aunque no siempre la haya.
Llevo
varios días escondiéndome de gran parte del mundo, esperando a que mi mente
regrese de su viaje y así volver a serenarme, a ser, a vivir entre el resto de mortales. Pero no sé muy bien que es
esta sensación de dejadez, de no querer salir al mundo… como si algo me
frenara, como si un peso muerto impidiera que mis pies se muevan. Supongo que es la usencia de mi mente
consciente que solo me deja en una especie de limbo sin emociones. No sé si la
vida es esto, o es que aun no se saborearla porque los recuerdos siguen
envenenando levemente mi existencia. Asumir? Ojala sea tan fácil como muchos me
lo pintan. Pero hay días en los que da igual todo, solo queda la sensación de vacío
y soledad en mi mundo. Mientras el resto de humanos solo me parecen marionetas
que se mueven apresuradas a mi alrededor mientras yo me siento inmóvil, una
observadora del entorno casi invisible, imperceptible… como un turista que observa
la arquitectura de una calle que acaba de ver por primera vez.
Pero al
final creo que todo se resume a sentirme más humana y quizás así deje de
existir esa sensación de vivir desplazada, de ser mera observadora de
situaciones que se escapan a mi control. Me siento un actor de cine mudo en una
película en estéreo; fuera de lugar y fuera de contexto. Puede que un día me pueda sentir parte de la
escena que estoy viviendo… porque aun puedo verme como un personaje en blanco y
negro en una foto a todo color… como desentonando o al menos llamando la atención
por su rareza,; de nuevo fuera de tono, de lugar y de contexto.
Supongo
que es parte dejar el miedo atrás… como me gustaría tener el control de mi
mente… aunque no sepa controlar mis emociones. Es como si mi mente fuera sola
decidiendo si hoy será un abismo o un día fácil. Ya no me ilusiono fácilmente…
no duran apenas las sensaciones buenas pero las malas perduran más de lo que deberían.
Por que solo esa intensidad en mi lado más oscuro? Por que no es fácil disfrutar
de los momentos sin que mi mente se empeñe en sabotearlos, una y otra vez con
las mismas ideas absurdas que da igual cuantas veces racionalice…. Ideas recurrentes
como un vomito constante. Y me pregunto de nuevo si esos episodios en los que
mi mente divaga podrán llegar a ser controlables… porque como digo ya ni me
preocupa del todo controlar mis emociones mientras pueda controlar mis actos, y
ahí mi cabeza es quien juega las cartas.
Cada día
es como una ronda a la ruleta rusa, será hoy el día en el que todo me explote
en el cráneo, en la cara… contaminando todo con el vacio y el miedo? Y cuando
pasa el día es como respirar… esta vez no estaba cargada… y al día siguiente
volver a empezar. Girar la ruleta y disparar rezando porque ese día
vuelvas a sobrevivir sin salpicarlo todo
de mierda. Despertar es a veces como oír el sonido de un gatillo a cámara lenta…
y empezar a sentir una angustia en el pecho que solo se pasa a medida que se
aprieta el gatillo y el ruido de su acción se va disipando en el ambiente…
respirar hondo… llenar el vacío… decirte que no pasa nada y tratar de salir al
mundo con la mejor cara. Así son la mayoría de las mañanas impregnadas por el
miedo, por el TLP en estado puro mientras mi mente se va despertando a causa
del antidepresivo. Y pensar… cuando haga efecto te sentirás mejor, otra
bocanada intensa… y hacer como si nada pasara mirando al frente tratando de ser
alguien más, alguien normal que solo anda por la calle.
Aunque
en general todo está mejor es como si ya no pudiera disfrutar igual de la vida,
me dan demasiado miedo las decepciones y cualquier señal me hace pensar en un
escudo anti personas, para que no me dañen otra vez, para que no lleguen a mi
interior, para que no sepan lo que soy. Porque digan lo que digan el TLP te
impregna hasta ser parte de él, hasta ser su marioneta y no es solo tenerlo
como el que tiene una gripe… es vivirlo, sentirlo, padecerlo y hasta
traspasarlo constantemente en esas formas de ti mismo que ves reflejadas en
otras personas… Como si otros fueran tus espejos… remarcando tus miedos, tus
debilidades… y recordándote que hay que seguir luchando igual que tratas de impulsar
al resto para que sigan… quizás esta vez también sea mi derecho poder avanzar,
ser feliz o al menos intentarlo.
No sabría
decir si puedo ser feliz, porque si el placer en mi es tan efímero…como poder sentir
esa sensación de bienestar intensa que se llame felicidad… no es lo mismo un
momento placentero que estar feliz… estoy cansada de reírme a carcajadas
mientras una parte de mi sigue muerta, como si nada… como si todo el día
llevara una puta mascara… como si tuviera que esforzarme por sentirme viva… no
quiero seguir sintiendo que me estoy muriendo por dentro mientras mis risas apagan
mis gritos internos de agonía.
Es que
aunque quiera acallar esa parte de mi no sé cómo, no se calla aunque le
explique que es solo el TLP. Sigo necesitando la reafirmación del mundo, de
otra mente más clara que me diga si lo que pienso es real o es producto del
trastorno. Y no siempre me atrevo a pedir esas respuestas por miedo parecer
pesada, por miedo a parecer una trastornada… al final me siento atrapada en una
habitación sin puertas, de paredes transparentes… donde el mundo puede verme y
yo a el pero no podemos tocarnos. Como si vivieran una burbuja rezando porque
un día explote y deje de sentirme aislada, de querer estar aislada por momentos
y luego lamentarme.
Al final
se resume a miedo, frustración y a no saber que quiero porque absolutamente
cada idea me mata de miedo mientras trato de parecer valiente, de avanzar sea
como sea… Aunque pierdo la esperanza por momentos, luego la recupero; no sé si
es posible realmente salir de esto. Es con avanzar tres pasos y retroceder
cuatro… no sé muy bien por que me pasa esto. Estoy cansada de amontonarme y de
cada día y cada cosa que me pasa sea un cumulo de cosas que me afecta… como si
nada fuera controlable del todo porque me afecta todo demasiado. Cualquier
cambio, cualquier emoción, cualquier comentario… No tengo a nadie que esté a mi
lado fisicamente y me cuide, no sé si quiero eso nunca más porque al final me siento un ser
mediocre y dependiente… agónico e insufrible… Joder, tengo tanto miedo de mí,
me doy pavor e incluso asco. Me da miedo ser como soy, me da miedo no saber
salir de esto, me da miedo que no exista la esperanza. Me da miedo tener este
puto TLP que creía que no me afectaba ya tanto, pero es mentira. Me vuelve
loca, no me deja vivir, no me deja dormir, no me deja comer, no me deja
despegarme de lo que me daña…. Estoy harta pero no tengo ganas de acabar con mi
vida. Que puedo hacer cuando la vida duele demasiado, cuando pensar en ella te
paraliza y te duele el pecho y te falta el aire? Estoy asustada, confusa,
agotada pero no me duermo, cansada pero no me paro, agónica pero sonrío… No sé
si puedo o es que no se parar… no se decir basta, no me atrevo tampoco a no
continuar.
Comentarios
Publicar un comentario