Estigmas

Cuando pienso en mi diagnostico no tengo claro del todo si es una estigmatización, ya que no lo comparto con casi nadie. Pero cuando pienso en mi infancia tengo claro que una infancia de abuso es mucho mas estigmatizante que ningún diagnostico. Abusos que interfieren directamente e tu cerebro en tu forma de ver el mudo, de pensar, de sentir, de vivir… o mejor dicho, de subsistir. Esta clara que esta es la causa directa de ese jodido diagnostico, del que aun no sé si pensar que es para siempre, bien que se va acomodando y va mutando hasta ser solo una mota dentro de mi total existencia.

He criticado tantas veces la medicación psiquiátrica nunca he confiado en ella incluso en mis primeros contactos derivándose un trastorno alimenticio, que posiblemente solo era un preaviso del TLP que creo que llevaba acechándome desde que recuerdo… Pero ahora soy consciente de que la medicación me está sacando de un pozo muy hondo, está tomando mucho más tiempo de lo que pensaba y sin ayuda de la terapia tengo claro que esa medicación no haría ni la mitad delo que está haciendo ahora. Pese a todo no hago apología de medicaciones cronificadas, de trastornos que mutan porque solo son etiquetas genéricas para tratar de explica una infinidad de mundos que convergen en un solo término: psiquiatría.

Y creo que estoy empezando a entender que tantos años de dolor necesitan mucho tiempo de reconstrucción, porque tras más de dos años de terapia mi autoestima sigue siendo nefasta inexistente, irrisoria… Pero soy más consciente de que la mente me miente en demasiadas ocasiones, que solo tengo que seguir racionalizando y darme cuenta de lo absurdo de muchos de mis pensamientos sobre mí misma. La vida sigue dándome palos, y a parte de un diagnostico que pesa más de lo que quisiera, he de confesar que no tengo muy buena suerte… y mi nivel de tolerancia a la frustración solo puede ir en aumento porque con todas las situaciones que han sucedido en los últimos meses hace mucho que me hubiera quitado la vida.

Y aunque había mejorado en este sentido, también confesare que las ultimas semanas he vuelto a repetir esa célebre frase que resume prácticamente la que ha sido durante siglos mi filosofía de vida: “Yo solo quiero morirme”… aunque no lo idealizo, aunque no tengo impulsos suicidas he vuelto a tocar fondo a nivel emocional, la desesperanza invade la mayor parte de mis días. 

 

Y el tiempo va pasando, y hay fantasmas que parece que no acaban de morir, aun hay miedos que reviven cada vez que el nivel de estrés aumenta. Siempre es lo mismo, las mismas ideas… y creo que aunque lo llevo negando décadas sigue siendo esa mierda de Yo contra el mundo o más bien, El Mundo contra mí, aplastándome una vez tras otra… y yo por un lado haciéndome la dura, por otro victimizando mientras ahogo en mis propias lagrimas. Pero estoy contenta porque hace tiempo que abandone un ritual, y eso es porque no pasa tan a menudo como solía pasarme antes. Ya no me observo llorando en el espejo como el que mira a un extraño llorando y no se atreve a reconfortarle. Pese a eso he de decir que he vuelto a llorar bastante en terapia, y parece que me cuesta enfocar en el contenido de las frases que me dicen que haga caso a la razón y no a una mente perturbada que me engaña mucho más de lo que me gustaría reconocer. Ya no sé si miro el mundo bajo una lente rota que no tiene arreglo, o si solo esta empañada y algún día lograre ver la imagen completa… llegar a usar mas la razón y hacer menos casos a esos mensajes nefastos que hace demasiado que me persiguen… unas ideas que solo me hunden mas en mi propio estigma y alimentan la idea de que ese diagnostico se perpetúe como una macula que me contamina.