Otra vida

Ha pasado un año desde mi mayor paso en mucho tiempo, y puedo decir que ahora soy otra persona.
Mi mundo ha cambiado tanto, que casi me cuesta trabajo reconocerlo.
Pese a todo hay días, como hoy, en los que mis sueños me recuerdan donde estaba hace no demasiado tiempo; y he de decir que esos recuerdos logran estremecerme hoy mas de lo que hicieron incluso cuando sucedió.

Todo va cambiando aun mas a medida que lucho por romper las cadenas de la dependencia emocional. Hace un tiempo que emprendí un camino, pero hasta hace poco no era consciente de que es el tiempo de recorrerlo sola. Ya no hay nadie agarrando de mi mano, nadie que aporte esa falsa sensación de seguridad que antes me parecía indispensable para continuar con mi día a día.
 Pese que a aun lucho por no depender tengo claro que es una lucha necesaria.
Resultado de imagen de otra vida

Otras batallas, por el contrario, las he dejado de lado o incluso abandonado. He llegado a comprender que la necesidad de paz interior es mas importante que las ganas de arreglar cosas que hace demasiado que se rompieron.

A día de hoy, la noción de familia es algo completamente ajeno a mi. No siento haber formado parte de algo así nunca. Empiezo también a entender que no es este el momento de cambiar nada en este aspecto, seria otra batalla perdida de nuevo.

La soledad ha pasado de ser un miedo que me ataba a un estado que que logro valorar a ratos.
Personas que un día fueron todo mi mundo han pasado a ser un recuerdo en mi mente. Las metas se han tornado de algo duro de enfrentar a algo que logra motivarme.
No obstante, ha regresado la pereza de los sábados y el astio; aunque los domingos han dejado de ser sinónimo de agonía.
Las decepciones duelen menos bajo la idea de que la vida ha de seguir, debe continuar/

Esta serie de cambios me alejan de esa sensación en la que vivía antes, esa sensación de vivir constantemente en el limite. Pese a que aun sigo sintiendo demasiado.
Resultado de imagen de otra vida

He comprendido que mi estabilidad personal debe de estar basada en mi misma, en mi crecimiento. Ya no necesito esa mano que me guíe por el camino, ya no deseo seguir tampoco el camino que había emprendido hace tiempo.

Hoy me doy cuenta de que he salido de una situación que me aportaba caos, miedo. Estar sola parecía una tortura, pero ya vivía en una situación tortuosa y esa compañía no lograba llenar mi vacío constante.
Hace meses que la sensación de vacío se ha transformado en miedo y en incertidumbre, pero no es constante y es un gran alivio.

No quiero decir con esto que haya dejado de utilizar todas mis conductas inadaptativas, pero esta claro que ya no me enfrento a tantas situaciones que las hagan aflorar, y así poco a poco dejan de ser parte de mi.

Comentarios

Entradas populares